Las reuniones

En las empresas, se sigue dando mucho valor a las reuniones. No importa de lo que se vaya a hablar, lo importante es reunirse. Como si de una familia se tratara, se organizan reuniones para hablar de cualquier cosa. Es cierto que la mayoría de las cosas pueden resolverse por teléfono o correo electrónico, pero donde esté una reunión, que se quite lo demás. Si, además, esa reunión se hace a última hora, para acabar en un bar tomanado unas cañas, mejor que mejor.

Con esta filosofía, no es de extrañar que el teletrabajo no despegue. En España, el calor humano, prima. Por eso, si hablas de trabajar desde casa, vía Internet, videoconferencia, teléfono y correo electrónico, tira para atrás. Así no es de extrañar, ver las oficinas y los bares, llenos a partir de las 18:00, es donde mejor se acaban los negocios.

Por eso, creemos, que se desperdicia demasiado dinero, en cosas que carecen de valor y no aportan a las empresas, otra cosa que no sean gastos. Directivos de las compañías, las cervezas se toman con los amigos, el trabajo es para poder tomar esas cañas y disfrutar con la familia. Esperamos que con el tiempo la filosofía cambie y las cosas se vean de otra manera, pero lo vemos difícil, por lo menos a corto plazo.