Por último, nos queda hablar del trabajo por objetivos y lo que entendemos por él. Trabajar por objetivos es algo que se oye mucho, pero que realmente no se aplicac nunca. Todas las empresas se hartan de hacer planes, de seguir proyectos, metodologías y muchas cosas más, pero llegado el momento de aplicarlo, no son capaces de hacerlo. La consecuencia de esto es nefasta, ya que sacan proyectos hechos deprisa y corriendo con muy poca calidad, que luego pretenden arreglar.
Si el trabajo por objetivos fuese algo real, las cosas saldrían mucho mejor. Está claro que sería el mundo ideal, pero creemos que puede hacerse. Normalmente los proyectos no salen de un día para otro, por lo que, si se planifican bien tienen que salir bien. El problema es que se marea la perdiz demasiado tiempo antes de ponerse a trbajar, por lo que a la hora de trabajar, nos hemos comido todo el tiempo.
Trabajar por objetivos, por tanto, es tener claro desde el inicio, qué tiene que hacer cada uno y cuánto tiempo tiene para hacerlo. Si esto está bien dimensionado, las cosas saldrán solas y el proyecto en tiempo, con buena documentación y con una calidad más que aceptable.
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