Lo obvio no lo es tanto.

Pues si, a veces nos viene a la mente aquel correo electrónico, que paseó varias veces por nuestra bandeja de entrada, sobre las conversaciones entre un técnico del servicio informático y los usuarios.

A la mente nos llegan por ejemplo:

Usuario/a: Hola, buenas tardes, no puedo imprimir, cada vez que lo intento dice ‘No se encuentra impresora’. He cogido incluso la impresora, la he colocado en frente del monitor pero el ordenador todavía dice que no la puede encontrar.
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Operador/a: Ahora, pulse F8..
Usuario/a: No funciona.
Operador/a: ¿Qué hizo exactamente?
Usuario/a: Presionar la F 8 veces como me dijiste, pero no ocurre nada.
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Operador/a: Tu password es ‘a’ minúscula de andamio, V mayúscula de Víctor, el número 7….
Usuaria/a: ¿7 en mayúscula o minúscula?
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Usuario/a: No logro encontrar el simbolito para abrir el Word.
Operador/a: Mire en el escritorio.¿qué tiene ahí?
Usuario/a: Muchos papeles y mi bolso..

Pero claro, es cierto, que según lo que usemos en el día a día, hay términos que nos serán familiares, otros no tanto y otros, que no sabremos ni lo que son. Por eso, cuando tengas que ayudar a alguien, no des nada por obvio y pregunta todo lo que se te ocurra, lo que para ti es normal, para el que ayudas, probablemente, no lo sea.