El paintball

Este fin de semana hemos estado jugando al paintball. Nunca lo habíamos hecho y la verdad es que como experiencia está bien, pero sólo una vez como dijo uno de los que jugaba. A cierta edad, quizá trotar por el monte con el mono, la máscara y la marcadora, no sea demasiado complicado, pero pasada otras edades, te levantas al día siguiente con agujetas en sitios insospechados.

El juego es muy divertido, realmente simula una guerrilla. Te recomiendan que no dispares de cerca, que intentes hacerlo a no menos de 8 o 10 metros. De hecho, lo hemos comprobado, aquellos tiros a 2, 3 metros, dejan huella y duelen.

De todos modos, como cualquier juego, depende de la nobleza de los jugadores, ya que tiene que ser uno el que decida si le han dado, y al segundo tiro que recibas, tienes que salir del campo de juego. Si decides no salir en toda la partida, aunque te den, pues tienes mucha cara.

Por lo tanto, ya para acabar, si no lo has probado nunca, es muy recomendable, sueltas adrenalina, hacer deporte y te diviertes, pero necesitas, según los casos, hasta un día para recuperarte.