En muchas empresas, se establecen cientos de planes, para todo. El gran problema de esos planes es que al final, cosas que se hacen de una manera, se tienen que ajustar al plan, asumiendo, parte de la vieja estructura, la función. Al hacer esto, la vieja estructura, si no se le informa correctamente, pensará que se encarga de lo mismo que antes, obteniendo como resultado, que parte del plan desaparece, esto es, no funciona.
Por eso, es frustrante, ver en las organizaciones como se va aumentando progresivamente la burocracia, haciendo que cada vez se dependa más de la gente trabajadora, ya que escudados en el plan, los caraduras, podrán no hacer bien su trabajo, dejando al final la compañía, como una rueda de piedra, que rueda, pero muy lentamente por el peso que tiene.
A la hora de generar burocracia, planes, objetivos, o como queráis llamarlos, es muy importate, conocer bien cómo son las cosas desde dentro. Si el establecer el funcionamiento de tu compañía, lo dejas en manos de gente externa, que tienen que aprender primero el negocio y luego establecer los planes, es más que probable la pérdida de agilidad. Así que está bien planificar y mejorar los procesos internos, pero que lo hagan los propios involucrados en los mismos, asesorados por expertos en planificación, si queréis, pero no dejarlo todo en manos de los expertos. De dejarlo en manos de expertos, perderéis tiempo, agilidad en los procesos y dinero.
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