El título de esta entrada es más que obvio, pero parece que no se tiene claro. Para que un ordenador tenga un rendimiento óptimo, necesita estar refrigerado, si está demasiado caliente, los componentes electrónicos se resienten y rinden menos. Cada uno de los componentes, con el calor, pueden ralentizarse.
¿Porqué contamos hoy esto? Pues porque nos han llegado desde diversos sitios, lo lentas que van las conexiones a Internet. En parte porque muchos sitios, a los que llega mucha gente a pasar la vacaciones, necesitan un ancho de banda mayor, que no van a poner para un par de meses, en parte por el calor de las centrales, que se resienten en verano.
Por eso, si quieres un mejor rendimiento, ponte cerca del router (en caso de ser WiFi), intenta, siempre que puedas, conectarte por cable y por último, que las habitaciones donde estén los componentes de conexión, estén refrigeradas, para enviar el calentamiento que los ralentiza.
Por eso, en los grandes centros de procesos de datos, tienen grandes cantidades de aparatos de aire acondicionado, que permiten a los ordenadores, routers, etc... tener la temperatura óptima de funcionamiento.
Un último apunte, los ordenadores de sobremesa, están mucho mejor refrigerados que los portátiles, dentro de estos últimos, cuanto más pequeños, menos refrigeración tienen y también se resienten un poco más.
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