Sentirte engañado

Vayas donde vayas, tienes un serio riesgo de que te engañen, ese riesgo aumenta, cuando va asociado de desembolso monetario. Pero es matemático, vas a que te revisen el coche, encuentran algo, que desconocías que pasaba y que puede costarte dinero. Si por el contrario vas a un médico, casualmente lo que tienes, no entra en la póliza que pagas. Y podríamos seguir con un montón de ejemplos.

¿Cómo acertar? En nuestra opinión es imposible, por eso, muchas veces miramos poco lo que nos cobran, ya que al final, todo se iguala, todos tenemos, mas o menos, el mismo número de chorizos y de gente honrada, por lo que pagarás lo que paga cualquiera, a unos nos engañan con el coche y otros con los médicos.

Por lo tanto, ves al que te de confianza, aunque te cueste una pasta, ya que por lo menos, estarás tranquilo. Otra opción es recorrerte varios sin parar, hasta que des con el más barato, pero corres el riesgo de tener al que peor va a trabajar, a parte del tiempo que perderás.