Adaptaciones del entorno

Estuvimos el otro día en una casa en la que estaban adaptando varias cosas, entre ellas un ascensor salvaescaleras y números grandes en los ascensores que dan acceso a los pisos. Esto nos hizo reflexionar sobre cómo el entorno, se va modificando, según las necesidades de los que lo usan.

Cuando se tienen pocos años, comprar un chalet, puede ser algo bonito, muchas plantas, todas tuyas, pero tienes que pensar si esa será tu casa definitiva y por lo tanto, qué posibilidades de adaptación puedes hacer en el futuro, cuando las plantas y sus escaleras, sean casi insalvables.

Con la tecnología ocurre lo mismo, lo que para un niño aprenderlo es cuestión de segundos, a una persona mayor le puede costar varios meses. Por eso, la tecnología debe ir evolucionando, para ser lo más intuitiva posible, de hecho, debe ser lo más fácil de acceder. Los dispositivos táctiles, en los que lo que ves es lo que hay y si quieres algo sólo tienes que tocarlo, nos parece lo más adecuado. Sólo les falta una cosa, que lo que aparece, sea claro e inequívoco, poner varios navegadores en un dispositivo, puede liar, ahora bien si pones un icono que pone Internet, está claro que con eso vas a navegar por la red.

Ahí está el futuro, dispositivos de acceso sencillo, en lo que casi adivinen lo que estás pensando, para hacerlo. Es lo que, a nuestro parecer, están haciendo y parece que van por buen camino, sobre todo en los avances de acceso a dispositivos con el movimiento de tu cuerpo. Vemos un futuro en el que la televisión no necesitará un mando, simplemente levantarás un brazo y te mostrarán los canales disponibles para que señales el que deseas ver. Además, nos da la impresión, que no está muy lejos. Tiempo al tiempo.