Es algo, que últimamente comentamos mucho, la gran obsesión por los planes que hay en las empresas, al menos las que conocemos (sector informático). Para cualquier cosa, lo que primero que se pide es presentar un plan, que no está mal, pero claro apareces con un esbozo de lo que será el proyecto y te dicen que es poco detallado.Vamos a intentar explicar, lo que debería ser y para qué debe servir un plan.
Un plan es, lo que se debe seguir para poder llevar a buen puerto un proyecto. Pero claro, no puedes tener, exactamente el mismo plan, al salir del puerto de origen, que el que has cumplido, cuando llegas al de destino. La razón es muy sencilla, entre ambos puertos, puedes encontrarte muchos imprevistos, que obliguen a cambiar, sobre la marcha, el plan. Es más, al principio, lo más probable es que traces un plan muy somero y con poco detalle, que irás ampliando, según avance el proyecto.
En cuanto a lo de la utilidad del plan, es clara, ya que en cada momento, sabes hacia donde debes apuntar, para llegar a tu meta, que se supone será acabar el proyecto, en plazo y calidad.
Pero claro, cuando el que pide un plan, no sabe lo que es, ni para lo que sirve, te pedirá algo imposible de cumplir, esto es, un detalle de las tareas a realizar y fechas de entrega, que por supuesto, tendrás que cumplir, sí o sí. Con esta premisa, lo más probable es que ese plan, no sirva para nada y te pases la vida del proyecto, justificando porque no llegas a las fechas iniciales, lo que es una lástima, además de una pérdida de tiempo.
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