El arte de no decir nada

Como todos sabéis, en este blog nos metemos muchos con los consultores. Y es que últimamente llaman consultor a cualquiera. Porque se sepa pintar una Slide (transparencia de toda la vida), no se tiene porque ser un buen consultor.

La consultoría informática, tal y cómo nosotros la entendemos, debe ayudar al que la solicita a realizar la tarea que pide, otro cosa, es vender humo, que es lo que hacen la mayoría.

Si tu problema es que no sabes cómo atacar a una base de datos desde un programa en concreto, no puede venir un consultor y pedirte que le entregues dos o tres documentos y un esquema de lo que deseas, para poder hablar con un tercero de cómo hacerlo (es una exageración, pero no se aleja demasiado de la realidad). Lo que está claro es que tú, tenías el problema del acceso a una base de datos, des un programa y ahora, además, tienes el problema de tener que pintar tu problema, para que un tercero te ayude. Con las cosas así, lo que haces es contratar otro consultor, para que te pinte lo que buscas. Al final, en resolver tu problema, que tendría que ser un par de horas, tardas meses, te cuesta un dineral y además, la solución obtenida, por lo general, no suele ser la óptima.

Como decimos, lo hemos exagerado un poco, pero seguro que más de uno os habéis encontrado en una situación similar y sin manera de salir. Además, el cliente os aprieta con las fechas y no veis la manera de cumplirlas, por lo que sueles pasarlo realmente mal.