Ser el último en una fiesta

Muchas veces se dice que te quedas a cerrar, cuando sales el último de una fiesta, pero claro, tiene sus ventajas y es que, cuando te vas el último, puedes aprovechar para llevarte las sobras. Además, dependiendo del tipo de fiesta, te puedes proveer de cosas, para algo más tiempo, incluso para montar otra fiesta tu en el futuro.

De todos, esto, en España, es todavía peor, conocemos gente, que va a las bodas, por poner un ejemplo, con tartera, de manera que lo que no comen, sale en la tartera para casa. Y es que en España, para esta cosas, somos especiales y el que no corre vuela.

Por eso, si estás en una fiesta en España y ves que al final de la misma, la gente empieza a desaparecer, llevando debajo del brazo, botellas varias, no te asustes, siempre que se puede se hace. Lo normal es que se lleven las botellas abiertas, que no tienen salida, ya que las cerradas, por norma general, se pueden devolver a la tienda en la que las compraste.

Ahora bien, es verdad, que siempre se pide permiso al dueño de la fiesta, de manera que es un atraco, por decirlo así, legal, aunque nos taches de tragones, triperos y caraduras.