Seguir recurriendo

Cuando una multa llega a vía ejecutiva, las compañías de seguros que, además, tramitan recursos de multas, suelen decirte que la pagues si no es mucho dinero, porque tendrías que ir a juicio.

Pues bien, nosotros, ya que la multa que tenemos no es de mucho importe, hemos decidido ir un poco más allá a base de reclamaciones al órgano que nos ha puesto la multa. Hemos hecho una reclamación al ayuntamiento y luego reclamaciones al órgano recaudador.

Estamos a la espera de respuesta. De conseguir que nos la quiten, o por lo menos que se pronuncien, podríamos llegar a la conclusión, que incluso los que recurren las multas, puedan estar compinchados con los impositores, para que se cobren.

Si esto fuese así, estaríamos ante un paso más en lo que nosotros llamamos, ordeñar al ciudadano. Está claro que los que se supone que mandamos, somos todo lo contrario, a los que ordeñan. El gobierno nos pide austeridad, cuando ellos no la tienen, las empresas que nos dan servicio, estarían haciendo su labor para que el gobierno recaude por otro lado y probablemente, a cambio de eso, ellas cobrar un plus por ser órgano recaudador en la sombra del gobierno.

Es una pena que no tengamos más poder, o al menos, eso es lo que nos creemos, por eso, estamos buscando formas de reclamar constantemente. Medios hay, lo difícil es encontrarlos, pero una vez localizados, lo que hay que hacer es usarlos, hasta las últimas consecuencias, en algunos casos, nos llevaremos gratas sorpresas.