El título de la entrada, podría ser el nombre de una película, pero no van por ahí los tiros. En muchas ocasiones, hemos hablado de los departamentos y personas, que se dedican a trabajar, realmente, y que resuelven lo que les llegue, nosotros los llamamos resolutorios. Y es que, es difícil, hoy en día, encontrar gente que resuelva los problemas, en lugar de pasárselos al que tienen al lado.
Lo malo de ser resolutorio, por eso no hay más gente, es que esta muy mal "pagado". Vamos a explicarnos, no es que queramos que, al que hace su trabajo, se le triplique el sueldo, no. Lo que queremos, es que si alguien hace bien su trabajo en el tiempo, se le recompense. Esto es, cuando alguien, como decimos, es resolutorio, debemos valorarlo, no mandarle todas las cosas que el resto no es capaz de resolver, porque él (o el departamento) sí lo hacen. Lo que se debe hacer es premiarle, con dinero, con vacaciones, con ascensos, lo que sea, para motivar, que el resto de la empresa, haga lo mismo. Al hacerlo, como se suele hacer, se consigue el efecto que tenemos actualmente, que la gente huye de resolver, porque no gana, nada más, que más trabajo ingrato.
Pensarlo, y si veis en vuestra empresa a alguien que hace bien las cosas, premiarle (si está en vuestra mano), veréis, cómo alguno más se anima a ser así.
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