En las empresas, sobre todo las grandes, como para todo, tienen un departamento, que se encarga exclusivamente de gestionar los puestos de trabajo de la organización.
Esta labor, que es extremadamente sencilla, funciona fatal en muchas de ellas. La razón, en nuestra opinión, es, como siempre, los directivos. Resulta, que si montas un departamento, hay que dotarlo de personal y, como no puede ser de otra manera, lo primero es poner un director, que, como suele pasar, no asciende por lo buen gestor que es, si no, por los contactos que tiene.
Por eso, cuando un departamento, tiene que moverse de edificio, puede ocurrir, que el departamento quede totalmente despiezado, tocándole a cada persona, lejos de la persona con quien trabaja.
Una vez más, también según nuestra opinión, vemos claro que lo mejor, es tener a las personas en sus casas, de manera que sean responsables del su puesto y tener los edificios que sean necesarios, con grandes salas de reuniones (o modulares), que permitan montar reuniones, cuando sea necesario.
Vale, es utopía, pero no nos cansaremos de decirlo y recomendarlo. Igual, algún día, alguien, lo aplica.
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