No entendemos cómo la ley puede permitir a las compañías de servicios, cobrar facturas estimadas. Sinceramente, nos parece un atraco, de tantos que ya tenemos. Y es que, una factura estimada, es eso, estimada y no se basan en muchas cosas, simplemente en tu consumo anual habitual, lo que hace, que si tienes una casa alquilada y se va tu inquilino, al no tenerla habitada, te tocaría pagar NADA y pagas, más de lo que tu inquilino gastó el año anterior en esa fecha, porque la estimación, como no puede ser de otra forma, es al alza.
Y luego, una vez que te han cobrado, intentas arreglarlo, llamas para dar la lectura y resulta, que tu lectura, es inferior a la última que ellos tomaron como real, y entonces es que les engañas. ¿No será que habéis engañado vosotros hasta ahora que nos hemos dado cuenta? Pues parece que no, que el que se ha equivocado, es el cliente, como siempre.
Esta es otra de las cosas que se deberían arreglar, los clientes, deberían ser tratados, al menos, con respeto y atención y no estar, permanentemente, riéndose de ellos. Pero claro, para hacer esto, es necesario gastar dinero en ellos, cosa que no compensa.
Y cuando estás más que harto de una compañía, que te recibió con los brazos abiertos en su momento, te intentas dar de baja y no hay manera de encontrar el procedimiento, para entrar fue todo sencillo, pero la salida está completamente bloqueada, y no puedes salir. Toca, una vez más, al cliente, pelear esa salida.
Así que, mientras sigamos con estas empresas protegidas y los clientes sigamos aguantando carros y carretas, las empresas seguirán viviendo a nuestra costa y haciendo, exactamente, lo que les de la gana.
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