Diréis, qué tiene que ver la transparencia, con la tecnología, pues mucho. Los políticos usan mucho esas dos palabras, para describir lo legales que son, tan legales, que son transparentes. Pero esa transparencia, dista mucho de lo que realmente debería ser, y aquí, es donde la tecnología manda. Y manda, porque aplicando la tecnología, todo se convierte en transparente de verdad, porque no se equivoca y lo hace siempre igual.
Si queremos transparencia económica de los partidos, con mostrar los movimientos de sus cuentas corrientes en Internet, ya sería transparente lo que cobran y lo que no, pero claro, está la protección de datos, bueno, pues conectamos los movimientos de sus cuentas corrientes, con un programa, que muestre los movimientos, sin datos personales, y solucionado. Pero claro, entonces están las cajas, donde el dinero entra y sale de otra manera, también con tecnología, pongamos cajas automáticas, que nos informen de lo que entra y sale de las mismas. Pero entonces están los sobres, vaya, para esto, poca tecnología tenemos que aplicar.
Por lo tanto, por mucha transparencia que se quiera aplicar, si no hay voluntad, obviamente, ni a mano, ni tecnológicamente, vamos a conseguir ser absolutamente transparentes y así pasa, que nos venden una cosa, nos la creemos y luego, nos dan lo que les da la gana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comenta lo que quieras, pero no lo uses para hacerte publicidad, o el comentario será eliminado.