Miedo al despido

Sabemos que es una época muy complicada, que cuando te quedas sin trabajo, necesitas encontrar uno rápido, ya que de otro modo, el pago de hipoteca, centros de estudio de los hijos, la compra diaria, en definitiva, vivir, se hace muy difícil, por no decir imposible. Pero aún, así, no debemos tener miedo al despido y mucho menos, si gracias a ese miedo, la empresa consigue aprovecharse de ti.

Y es que a las empresas (que no nos olvidemos, las forman las personas), por lo que general, no piensan en ti, si no es in sí mismas. Por lo tanto, si un director, decide que quiere ascender, o mantener su puesto de trabajo, y sabe que tienes miedo a perder el tuyo, va a apretarte hasta que te exprima la última gota y, en ese momento, te despedirá, sin ningún remordimiento.

Por lo tanto, ante esa situación, lo mejor que puedes hacer, es plantarle cara y cuando veas que se aprovecha de ti, echárselo en cara e incluso, no hacer lo que te pide. Efectivamente, esa actitud puede acabar en despido, pero podrás salir de la empresa con la cabeza bien alta, e incluso, con un poco de suerte, puedes denunciar, de manera que saques, o un beneficio, o la readmisión.

Es cierto, que, en cualquier caso, no sería muy agradable seguir trabajando con personas que sabes que no te aprecian, pero probablemente si siempre intentas hacer bien tu trabajo, y en la empresa te necesitan, cuando les plantes cara, lo más seguro es que no te echen y, además, te tengan un respeto, que no tendrás de otra manera.

Para nuestra suerte, la esclavitud no existe en España, por lo que las leyes no protegen y si en una empresa, los directivos nos tratan como a esclavos, que estamos a lo que nos pidan y nos dejamos, volveremos a la época feudal, en la que todos hacen lo que diga el señor. En nuestras manos está evitarlo, no te dejes pisotear.