En las empresas, de vez en cuando salen normativas de lo más absurdas. Por ejemplo, un departamento te pide que les mandes la información de lo que quieres hacer, con nombres y datos, que ellos manejan, pero, la normativa, dice que les tienes que darles tu, ea información. Obviamente, ya que necesitas hacerlo, les mandas el nombre y datos que crees que son y con las mismas, te rechazan la petición, ya que no son los que ellos esperan. Y entonces te preguntas, ¿quién ha creado esa normativa, donde tienes que proporcionar los datos a quien los tiene?
Y es que, como decimos siempre, las normativas las hacen, malos consultores, que desconocen por completo cómo funciona tu empresa y ponen unos procesos y normativas que tienen muy poco sentido. Ahora, te los presentan tan bonitos, con manuales, presentaciones, etc... que les compras el proceso y luego no hay manera de llevarlo a cabo.
Así que, si queréis hacer algo, probarlo, verlo en primera línea y, si no funciona como dicen las presentaciones del consultor, mandarle al consultor de vuelta a su empresa y apoyaros en vuestros empleados, que son los que realmente harán un proceso, que funciona y ahorra tiempo, que es el objetivo de la automatización de procesos, mejorar el rendimiento del proceso, para aumentar la productividad de tu empresa.
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