Cuando te peleas por conseguir algo, que es bastante imposible, y no lo consigues, pero te aproximas algo, suele llegar tu jefe y pedirte que lo consigas como sea. Es algo que no entendemos, si algo es imposible, no puedes exigirlo, puedes pedir que se intente, que crees que es mejor, pero jamas exigirlo. Y claro, luego te sorprendes, si al que se lo pides te toma a pitorreo y te vacila, pero es lo que te mereces, cuando pides algo que no puede hacerse.
Una vez más, todo esto, nos lleva a insistir en que la única forma de sacar las cosas adelante, es con el trabajo en equipo, aportando todos de todo y haciendo que las cosas sean mejores, por ese aporte. Si se sigue pensando en departamentos estancos, que no reman en la misma dirección, al final, tendrás cosas imposibles de realizar, que además, exigirás que se hagan, a pesar de saber que no se harán nunca. Esta forma de trabajar, trae mal ambiente de trabajo y con ello, muy malos resultados.
Tú eliges, o montas una empresa con buen ambiente, en el que todos se apoyen entre sí, o bien, creas una empresa, en la que cada uno es responsable sólo de su parte, intentando dejar mal al resto, por lo que el ambiente será penoso. En el primer caso, todo te irá sobre ruedas y en el segundo, las cosas saldrán realmente bien.
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