Nos sorprende un montón, cuando llegamos a una tienda a preguntar por algo y te lo dicen con desgana y como si las ventas, para ellos, no fuesen importantes.
Está claro que si quieres vender, lo que tienes que hacer es tratar bien al cliente, de manera que compre. Y para ello, lo que hay que intentar es tener simpatía, si el cliente quiere algo y no lo tienes, intentar ofrecerle algo que pueda servirle, etc... De esta forma, el cliente, al ver que quieres ofrecerle ayuda, al final, algo compra y por poco que sea, al cabo del día, harás una buena caja.
Pero por desgracia, en muchos negocios, el dueño no es el que está al pie del cañón, por lo que los empleados, a los que el negocio, les importa poco, no hacen esos esfuerzos. Pero de lo que no se dan cuenta, es que si el negocio va mal, los que más pierden son ellos, que se quedarán sin trabajo.
Así que seas empleado o empleador, cuida a tus clientes, te vendrá muy bien.
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