Ahora sí que empieza la Navidad, con la cena de Nochebuena, previa a la misa de gallo, a la que, curiosamente, va mucha gente que no aparece por la iglesia el resto de año.
Quizá, aunque seamos un estado aconfesional, esas raíces cristianas de nuestros padres y abuelos, que tan acostumbrados nos tienen a acercarnos a celebrar el nacimiento de Jesús a las 0:00 del día 25, siguen trayéndonos tan buenos recuerdos, que nos obligamos a disfrutar de ellos.
Además, en esa misa de gallo, como casi todos van con la cena reciente, un pelín pasados con el vino de la cena, todo son sonrisas, que hacen que los padres se vuelvan un poco niños y los niños, se rían de las tonterías de sus padres.
¡Feliz Nochebuena!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comenta lo que quieras, pero no lo uses para hacerte publicidad, o el comentario será eliminado.