No hay cosa peor que llevar un vehículo al taller, con una avería, por leve que sea. Siempre tienes que ir pensando en que te va a costar dinero y normalmente, no poco.
Las averías, pueden ser de las que te dejan tirado, por lo que la que arreglarlo, aún costándote dinero, las sufres menos. O averías, con las que podrías vivir, como un sensor del ABS, que si no funciona el ABS, hace no mucho, los coches ni lo tenían, por lo que podrías vivir y manejarte sin él.
Pero el caso es que tener una luz en el salpicadero, avisándote de que algo no funciona, no es agradable y por lo tanto, te animas a arreglarlo, llevando el coche funcionando y saliendo del taller, con menos dinero y con una mejora, que no notarás, salvo que en un momento crucial la necesites.
Además, de no hacerlo, Murphy se encargará, de que necesites el sistema que falla y entonces, echarás de menos, no haberlo solucionando en su momento.
Así que aunque os duela, cuando tengáis un problema en cualquier vehículo, por pequeño que sea, intentar solucionarlo cuanto antes, para no arrepentirnos después, aunque os duela en el bolsillo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comenta lo que quieras, pero no lo uses para hacerte publicidad, o el comentario será eliminado.