Eludir la responsabilidad

Hoy queríamos hablar del tiempo que se pierde intentando eludir la responsabilidad, y en caso de que no sea posible hacerlo, intentar "compartirla". Y es que, es muy habitual que cuando sea necesario tomar una decisión, nadie quiera dar la orden, ya que la responsabilidad de lo que ocurra tras la orden, será del que la ha dado.

Esto en las empresas en un gran problema, primero, como decimos, por el tiempo que se pierde y segundo, a consecuencia de este, porque el proyecto se retrasará, o incluso, nunca llegará hacerse, ya que nadie asumirá la responsabilidad del mismo.

Como hemos dicho muchas veces, "el que nada hace, nada rompe", por eso, preferimos gente que se moje, que tome decisiones, aunque en algunas ocasiones, se equivoque y tenga que rectificar. La pena es que esos, pocas veces ascienden, ya que los fallos, siempre les pesarán más que todos los aciertos que tengan, lo que nos lleva a la conclusión de siempre, el bajo nivel de dirección que tenemos.