Es tremenda la primavera de éste año, que llegue con nieve y un frío impropio de su época, nos trae por el camino de la amargura. De hecho, si sales con poco abrigo, sin darte cuenta, te quedarás helado y cuando llegues a casa, por más mantas que te pongas, no entrarás en calor. Y es que el frío a destiempo nos pilla desprevenidos y es complicado estar con ropa adecuada, lo que hace de la primavera y el otoño las épocas de más frío.
La mejor manera de entrar en calor, al menor para nosotros es tomarnos un buen caldo caliente, que nos caliente por dentro, haciendo que poco a poco, todo el cuerpo entre en calor. De hecho, si estamos con mantas, con abrigos, etc... no se entra en calor igual de rápido que con un buen caldo caliente. Y es que lo que hacían nuestros abuelos, es lo más eficaz siempre. Y ellos sí que pasaban frío.
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