Después de muchos años trabajando, todos aspiramos a tener una plácida jubilación. Para ésto, buscamos prejubilarnos, con los menos años posible, de manera que tengamos el mayor tiempo posible buena salud, que al final es lo que nos permite disfrutar, después de darlo todo trabajando.
Pero esa jubilación, cada vez la quieren alargar más, ya que cuanto más se alargue, más fácil es que el estado pueda pagarla. Y quizá, lo que tengamos que hacer, es cambiar esa idea. La jubilación es maravillosa, porque puedes hacer lo que te dé la gana, sin necesidad de tener obligaciones. Por lo que el cambio de idea, consiste en conseguir, durante tu vida laboral, conseguir una afición, sea la que sea, que te dé dinero. Y por lo tanto, cuando quieras jubilarte, realmente no tengas que hacerlo, simplemente tendrás que atender tu afición, más o menos cuando quieras y esa afición, es la que te paga tus gastos.
Y con ese cambio de mentalidad, se consiguen dos cosas, la primera que tu afición genera trabajo a otros y que tú disfrutas con tu afición, que te paga la jubilación ficticia.
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