Ante la declaración de Estado de Alarma en España y la recomendación (de momento) de quedarnos en casa, nos resulta tibio que la iglesia católica, que se supone que debe estar unida en estos momentos, para luchar contra la epidemia, no lo haga, y cada diócesis saque su comunicado, como le parezca al obispo de turno.
Así pasa que "Todos los fieles cristianos de la diócesis de Madrid están dispensados de la asistencia a la celebración dominical", como ha publicado el arzobispo de Madrid. Y sin embargo "La apertura de los Templos parroquiales en horario habitual; mantener los horarios habituales en las celebraciones Eucarísticas y, si se viera necesario reducir el número de fieles en estas, multiplicar las celebraciones de la Santa Misa para atender al máximo recomendado de un tercio de ocupación que pueden tener los lugares cerrados", como ha publicado el Obispo Complutense, Juan Antonio Reig Pla.
En nuestra opinión, se debería sacar un comunicado más genérico, desde el mismo vaticano, por el Papa Francisco, dejando claro que todos los católicos, que estén en zonas donde se decreta quedarse en casa y se han cerrado todos los comercios salvo de alimentación y salud, están dispensados de asistir a la celebración de la Eucaristía, asistiendo a la misma de forma "remota", haciendo una "comunión espiritual", como recomiendan en la diócesis de Madrid.
En definitiva, ante grandes problemas, donde todos tenemos que remar en el mismo sentido, debe hacerse así y nos parece mal, que la iglesia católica, no lo haga.
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