Hace años el correo escrito en papel era el rey. En estas fechas escribir un crisma a la familia era lo típico y se hacía siempre. Esa tradición ya ha quedado en el olvido, ya que empezó a hacerse por correo electrónico. Y eso, como todo, también llega a su fin, ya que casi todo el mundo tiene WhatsApp y es donde ahora realmente se tiene un contacto más directo para casi todo.
Y el correo electrónico, poco a poco, irá perdiendo relevancia, en parte por el mal uso que hacemos del mismo y el parte, por las nuevas aplicaciones que permiten controlar muchas cosas, que antes se controlaban por correo. Por eso, creemos que poco a poco el correo electrónico será una herramienta que se use menos y que sean las herramientas colaborativas, las que tomen el control de las organizaciones. Así, para cosas personales serán las redes sociales las que manden (incluyendo aquí las de mensajería, como WhatsApp) y para las profesionales los portales colaborativos.
Igual nos equivocamos, pero cada vez recibimos menos correos electrónicos personales y en lo profesional, cada vez recibimos más cosas por portales colaborativos, por lo que el cambio está ahí y llegará.
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