Esta semana llega la Navidad, con las cenas y comidas familiares, donde nos tenemos que plantear si realmente es necesario hacerlas, o quizá sea mejor tener una navidades diferentes, conectando en remoto y más espiritualmente, que físicamente.
Y es que, este maldito virus, que nos tiene completamente locos, del que cada día salen cosas nuevas, ahora resulta que ha mutado en Reino Unido, que es más contagioso y nos preguntamos ¿realmente necesitamos tanto esas cenas familiares, que pueden llevar a contagiar a familiares?
Pues tenemos nuestras reservas y quizá lo mejor sea quedarse cada uno en su unidad familiar, contactar por video todas las unidades familiares, brindar en la distancia y evitar esos contactos, que esa será la mejor forma de evitar que nos contagiemos.
La vacuna, por muy buena que sea, no va a eliminar el virus y lo que está claro es que tampoco se tiene un medicamento que pueda utilizarse con seguridad, pero sí está claro que, si no nos juntamos, no lo propagamos.
Así que valorar las opciones y plantearos quedaros en casa, para celebrar la Navidad, por ejemplo en junio, que parece que el virus es menos virulento y además, muchos estarán vacunados.
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