Es sorprendente lo complicado que se vuelve encontrar leña, en plena temporada de consumo. Y es que, según nos dicen, lo mejor es comprar bastante en verano, que además está completamente seca, que hacerlo ahora, que además de empezar a escasear, tenemos el problema de que pueda estar bastante húmeda.
Y si buscas en foros, parece también que las empresas honradas, en este tipo de negocio, escasean bastante. Algo que no entendemos, ya que al final, tener clientes es tu objetivo y si les engañas, los pierdes y pierdes posibles futuros clientes, como siempre decimos.
Es cierto que, al ser un producto muy barato (0,15 -0,30 €/Kg), la gente tampoco hace mucho caso. Y eso, que estamos hablando de una horquilla que va de la mitad al doble, pero claro, hablando de céntimos de euro, un céntimo arriba o abajo en 1.000 Kg (que es más o menos el consumo habitual por año), nos lleva a 10 € arriba o abajo, que no es demasiado. Si lo comparamos con la horquilla, hablamos de que el año entero de leña, te sale entre 150 y 300 euros, que sí, es el doble, pero no es una locura, por lo que de eso se ayudan.
Así que, si sois consumidores leña, intentar buscar un proveedor que os de una leña que os guste y comprarla en julio y agosto, para que podáis estar el resto del año tranquilos y calientes delante de vuestra chimenea.
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