Hoy en día, una de las cosas que más se hacen es engañar al contrario. Sobre todo pasa en las empresas de servicios, que envían unas sobre valoraciones a los clientes, de manera que puedan rentabilizar a los equipos que necesitan montar, porque de no hacerlos, los números no salen.
Y claro, las empresas que les contratan, hacen lo propio, les prometen más contrataciones, pero en muchos casos no se las dan, consiguiendo con ello, que al final, no tengan las cosas hechas en el tiempo y forma que ellos esperan.
De todos modos, como ambos se estén engañando, no nos dan ninguna pena, de hecho, quien nos da pena son los trabajadores, que son los que menos cobran y por el afán de lucro de unos y otros, lo que consiguen es que cada vez estén más hartos, ya que ven pasar el dinero, sin disfrutarlo.
Así que todo es cuestión de proponérselo y aquellos que de verdad trabajamos, dejemos de hacerlo de verdad, poniendo la carta de dimisión encima de la mesa, de manera que, cuando los "trileros" se vean solos y sin nadie que haga el trabajo, igual cambian las tornas.
La solución real es que cada uno pague a sus trabajadores y se fuesen las malditas empresas de servicios bien lejos, ya que son meras empresas de trabajo temporal, donde, cuando un cliente te echa, por lo general, la empresa de servicios, hace lo propio. Si en lugar de a una empresa de servicios, contratas tú a la persona, te ahorrarás dinero y sobre todo, timos.
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