Seguro que a alguna persona de las que nos seguís os ha pasado, habéis tenido una excedencia por diversas razones (hijos, cargo público, estudios,...) y a la vuelta, tenéis dudas de si seguís o no a tope, para seguir dándolo todo en tu trabajo y no lo tienes del todo claro.
Pues bien, la mejor manera de saberlo es ponerte en el mercado. Apuntarte a ofertas de empleo, ver si te llaman, incluso si alguien te contrataría y con eso, comprobarás que no es que estés en tu trabajo simplemente porque no te pueden echar (por lo general), ya que has vuelto de una excedencia, sino que estás realmente en el mercado y esa excedencia, no ha tenido efecto sobre tu carrera.
Obviamente, el tipo de excedencia puede incluir mucho, tanto por la duración de la misma, lo que has hecho en ese tiempo, etc... pero de verdad, probarlo, porque veréis que hacerlo os va a dar más alegrías que penas y quizá, hasta os hagan una oferta que no podáis rechazar.
Y es que, buscar trabajo, no sólo sirve para cambiar de empleo o salir del paro, muchas veces te sirve como motivación, para confirmar que no estás fuera del mercado y en caso de estarlo, como decíamos el otro día, tomar las riendas y darle la vuelta a la tortilla.
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