Es una frase dura, con la que titulamos hoy la entrada, pero cuando se está programando, sobre todo cuando te definen ciertas cosas, como mensajes que debes mostrar, nombres de campos, etc... no debes pensar, te debes ceñir a la documentación y con ello, hacer el programa.
Obviamente, sí debes pensar y de hecho, si algo de la documentación crees que está mal, debes proponerlo para que se cambie, pero nunca hacer un cambio por tu cuenta, porque piensas que es mejor, ya que, de esa misma documentación saldrán las pruebas y de ellas, sacarán errores, que no deberían salir si todos tocan las cosas, tal y como se indica en el documento.
Por eso, aunque a los que trabajamos en esto nos cuesta un montón, tener una buena documentación antes de empezar un proyecto, es la base para que todo salga lo más rápido posible. De hecho, con una buena documentación, puedes paralelizar tanto el desarrollo, como las pruebas y, a falta de las pantallas, la documentación.
Así que si estás programando y un texto no te convence, no innoves, pregunta, propón tu idea y de aceptarse, se aplicará, primero en la documentación para que todos estén informados y luego en el resto de partes implicadas.
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