Mirar para otro lado

Si ayer hablamos de contextualizar las cosas, hoy queremos hablaros de otro gran problema que tenemos actualmente y la causa de muchos problemas actuales. Y no es otra cosa que, sabiendo que algo está mal y hay que hacer algo, se mire para otro lado, porque las fuerzas que tienes en tu entorno, no te permiten obrar de otro modo, sin verte afectado por ello.

Y es que, temas como el del Mar Menor, donde todos saben que el problema son los vertidos de tóxicos, procedente de la agricultura intensiva de la zona, todos miran para otro lado, ya que, prohibir ese tipo de cultivos y atacar a todo lo que no sea agricultura ecológica y sostenible, va en contra, no ya de los agricultores (que en parte también), sino de aquellos que tienen aseguradas las compras a estos y que cada año les piden más y más producción. Esos empresarios, que la mayoría no sabrá ni dónde está el Mar Menor, son realmente el problema, ya que imaginamos que amenazan con abandonar a su suerte a esas tierras, si el coste de producir es más alto, como sucedería con la agricultura ecológica.

Por lo que, una vez más, se pone de manifiesto el problema de la sociedad en que vivimos, donde sólo pensamos en ir al supermercado, comprar barato y no pensar en quien y cómo produce, si se pueden ganar la vida con ello y claro, al final, la única manera de mantener eso, es sobre produciendo, a base de cargarnos el planeta. Una pena, desde luego.