Siempre que hay un problema en una empresa, por norma general, detrás del mismo, suelen estar las mismas personas y eso pasa, porque los problemas, pueden ser más o menos complejos, tener fácil o difícil solución, pero las personas que los tratan, son las que deciden si abordarlos, o simplemente quejarse sin hacer nada, haciendo que crezcan.
Así que, cuando llamas a un servicio técnico y te atiende una persona que intenta ayudarte, que te traslada las normas de la compañía para hacer las cosas, que te da su correo para darte un trato más personalizado, es algo que agradeces, ya que, lo que te sueles encontrar es lo mismo, pero sin tomarse interés, por lo que vas de llamada en llamada, contándole lo mismo a diferentes personas sin obtener solución.
Y eso que pasa con los centros de atención al cliente, pasa en los departamentos de las empresas, hay personas que se hacen suyo tu problema y te ayudan a solucionarlo y otras que simplemente te informan de lo que hay y que te busques la vida.
Intentar siempre empatizar y dar un buen servicio al que te pide ayuda, sólo por eso, las cosas te irán mucho mejor a ti.
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