Cuando vamos por la calle, ya sea a pie, en patinete, en bici, en moto, en coche,... cuando vemos a un agente de la autoridad, aunque no hallamos hecho nada, nos ponemos nerviosos, por si nos detiene.
Y nada más lejos, en muchas ocasiones, hemos circulado detrás de la policía local, nacional o guardia civil y al ir lentos, porque estén patrullando, buscando algo o porque no le apetece ir deprisa, les hemos adelantado y hemos seguido nuestro camino, observando cómo se quedan detrás de ellos, muchos otros vehículos, entendemos que por el miedo irracional.
Obviamente lo que no puedes hacer es vacilarles, hacerles una pasada macarra, en definitiva, hacer alguna infracción, ya que les obligarás a actuar, como debe ser. Pero si tu actuación es normal y no infringe ninguna norma, estate seguro que no te van a buscar las cosquillas y te dejarán ir.
Por lo tanto, respetar las normas y estar tranquilos cuando aparezca la autoridad, ya que están para ayudarnos, no para meternos miedos, aunque muchos lo tengan.
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