Vergüenza ajena

Como sabéis, tenemos bastante manía a la clase política de este país. Nos gustan mucho los políticos vecinales, que dejan temporalmente sus carreras profesionales, para poder servir al resto de vecinos. Pero el resto de políticos, digamos "profesionales", nos parecen un triste engaño.

Y lo peor es que no paran de corroborarlo, con la renovación del PSOE, donde vuelven al redil muchos de los que estaban en contra de Pedro Sánchez, en cuanto se les vuelve a llamar.

Nos sienta mal, porque no entendemos que tengan que renunciar a sus principios, para poder seguir montados en el carro de la política. Los que no tienen otro trabajo, podemos entender que no les quede otra opción, si quieren seguir cobrando dinero del partido, pero otros, que teniendo su trabajo, sigan tragando sapos y culebras, es inaceptable.

Pero así son los políticos "profesionales", nada de servir a las personas, simplemente engordar su ego y creer que todo lo que pasa es gracias a ellos, sin darse cuenta que realmente es a su pesar.